Antolin Palomino Olalla
Un gran encuadernador:
Antolín Palomino Olalla es uno de los encuadernadores españoles más significativos de este siglo. Nacido en Fuentenebro, (Burgos) el 2 de septiembre de 1909, de pequeño aprendió el arte de la encuadernación por pura casualidad, pues vivía frente al taller de los Hermanos de las Escuelas Cristianas en la madrileña calle Juan Bravo. A través de la ventana de su cuarto pudo aprender de ellos los primeros rudimentos del oficio.
Estableció su pequeño taller en 1942 y en él realizó trabajos de lujo para centros oficiales y para célebres bibliófilos, llegando a ser uno de los mejores encuadernadores de toda la historia de este arte en nuestro país. Realizó numerosas obras para los mejores coleccionistas españoles y extranjeros. Sus trabajos llegaron a ser uno de los regalos imprescindibles con los que se agasajaba a los mandatarios extranjeros que llegaban a España. La labor de Palomino se distinguió siempre por su, absoluta perfección técnica.
Su fama pronto traspasó las fronteras siendo contratado en 1954 por Oscar Osorio, presidente de El Salvador, para formar encuadernadores en la Imprenta Nacional, realizando entre otras la encuadernación de la Constitución. Dos años después, en 1956 fue contratado por el señor Cámara, para formar la Escuela de Artes Gráficas en la República Dominicana. A los pocos meses regresó a España y reabrió su taller madrileño. Muy pronto recibió encargos del coleccionista Bartolomé March Servera.
Tras varias décadas de trabajo llegó a reunir la segunda colección más importante del país de herramientas de encuadernación, después de la del maestro catalán Emilio Burgalla. Colección de hierros que fue adquirida por el Ayuntamiento de Madrid en 1982 siendo alcalde Enrique Tierno Galván, y que permanece en la Sección de Encuadernación de Artes Gráficas Municipales. A partir de entonces, y hasta su muerte, Antolín Palomino trabajó en dicha imprenta, dedicando sus últimos años a impulsar el desarrollo de la encuadernación y a evitar que sus habilidades se perdieran con su desaparición. Últimamente empleaba gran parte de su tiempo en el diseño de papeles pintados para decorar las guardas de los libros. Cabe citar también su importante aportación de la técnica al engrudo "debajo del agua". En 1992 el Centro Cultural Conde Duque dedicó una exposición monográfica a sus papeles de aguas y en Madrid se fundó, en su memoria, en 1993, la Escuela Taller Antolín Palomino Olalla.
Premios y medallas:
Aondecoraciones concedidas a Antolín Palomino Olalla:
Segunda Medalla en la Exposición Nacional de Artes Decorativas (1949)
Cruz de Caballero de Isabel la Católica (1959)
Encomienda al Mérito Civil (1965)
Encomienda de Isabel la Católica (1968)
Medalla de Oro del Trabajo (1975)
Medalla de Oro al Mérito en la Artesanía, del Excelentísimo Ayuntamiento de Madrid y la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Madrid (1980)
Medalla de Oro de Bellas Artes (1986)
Bibliografía:
Memorias de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, Volumen 42. Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona. Academia de Ciencias y Artes de Barcelona., 1973
Antolín Palomino Olalla: Autobiografía, conocimientos y recuerdos sobre el arte de la encuadernación. Madrid, Imprenta Artesanal del Ayuntamiento, 1986..
http://www.realbiblioteca.es/prb/proyectos/index.php?id=92
Instituto Nacional del Libro Español. El Libro español, Volumen 10,Número 109,Parte 1 -Número 120,Parte 1. Instituto Nacional del Libro Español, 1967